martes, 18 de octubre de 2011

[SeIdea][FanFic] Jealousy 5 [Golden Pair, Stronger Pair & 8059]

Anime: Prince of Tennis & Katekyo Hitman Reborn!
Pareja: Golden Pair + Stronger Pair + 8059
 
Su intención, era poner en ridículo al idiota, gritándole que era un irresponsable imbécil que lo había dejado colgado un día de tutoría, que había hecho que desperdiciara tres horas de su valioso tiempo, esperándolo. Sin embargo, quien quedó en ridículo al abrir la puerta de la habitación del idiota, fue él, pues al parecer, al padre de Yamamoto se le había olvidado decirle que el idiota no había llegado solo, sino muy bien acompañado, y que él, solo era un incordio.
No era necesario que le explicaran lo que pasaba ahí, en la escena que representaban en el suelo Yamamoto, y ese tal Eiji, quedaba todo dicho: El idiota sobre el pelirrojo, sosteniéndole las muñecas contra el suelo. La ropa revuelta de ambos. Su desconcierto. Obviamente, había interrumpido.
--¡Gokudera…! -Susurró con dificultad el moreno, empujando fuera del cuerpo de Gokudera, su consciencia.
De pronto, todo parecía una mentira, un programa de televisión muy bien elaborado, un dorama de esos que hacían llorar a las chicas de la escuela y suscitaban estúpidas discusiones y fantasías. Y él, Gokudera, era un lejano espectador, ajeno a la trama ¿no era así?
Sus labios temblaron, los abrió. Su voz, se ahogó en los primeros intentos, y después, las palabras que salieron de su boca, no eran suyas, eran las de un actor que se quejaba porque las hormonas del personaje que representa el otro actor, estaban sobre sus estudios, en los que él, tontamente aceptó ayudarle ¡pero claro! ¿Qué más podía esperar de un friki del baseball? ¡Así que ni de chiste, debía ocurrírsele al imbécil japonés, volver a pedir su ayuda! Que se la pidiera al trasero de su amante si en eso era lo único que podía pensar, aun después de todas las… ¡malditas veces que dijo que lo amaba a él, a Gokudera Hayato! ¡Era todo!... solo eso quería decir…
Su cuerpo -un cuerpo que no sentía suyo- se giró, no lo suficientemente rápido para ocultar el torrente de lágrimas que traicionaba su retahíla de reproches y revelaba su verdadero sufrimiento. Echó a correr escaleras abajo, para precipitarse fuera de la casa sin siquiera hacer caso al padre del idiota, que preocupado por las lágrimas del pequeño italiano, y la desesperación con que su hijo se abalanzó en pos suyo, se quedó mudo, intercambiando miradas sin interrogantes fijas con Eiji, quien parecía tan o más desorientado que él, de pie en el descanso de las escaleras.
Lo cierto era, que aunque Yamamoto siempre iba a su departamento, ya fuera a recogerlo para hacer las tutorías en su casa o para hacerlas en su departamento, ese día sabía que no iba a pasar, lo presentía con una fuerza animal que de haberle hecho caso, le habría evitado aquel trago amargo. Si desde el momento en que escuchó su conversación por teléfono, o en el que los vio encontrarse al finalizar las clases ese día, le hubiera hecho caso a las punzadas dolorosas en su pecho, no estaría así. No estaría sintiendo que su mundo se acababa, que cada palabra, cada declaración de Yamamoto se le venía encima como una roca de toneladas. No se habría mostrado débil, derrotado… dolida y locamente enamorado.
Gokudera, Gokudera, Gokudera, repetía con urgencia Yamamoto en su cabeza, buscando entre calles la figura de su tormenta, que a dos cuadras de persecución, había conseguido escabullírsele. Cada vez que lo llamaba insistente en sus pensamientos, mordiéndose los labios para evitar gritar, la imagen del peliplata, con sus hermosas mejillas surcadas por el llanto, era evocada como una patada en la boca del estómago, que le arrebataba el aliento.
¡¿Pero porque?! ¿Por qué había pasado eso?
¡Si tan solo Gokudera hubiera permitido que atrapara su muñeca mientras corrían escaleras abajo! ¡Si tan solo hubiera dejado que lo estrechara entre sus brazos, y le hubiera permitido hablar! Si no fuera tan impulsivo, si hubiera escuchado la discusión que tenía con Eiji momentos antes, cuando Yamamoto intentaba detenerlo, persuadirlo de que no llamara a Oishi y dejara que fuera él quien lo buscara para obligarlo a darse cuenta de cuan abandonado lo había tenido, tras escuchar la avergonzada explicación de­ Eiji -de su fallido plan de utilizarlo para darle celos, que al final, improvistamente, se llevó acabo-. Si tan solo, Gokudera, se diera cuenta de que lo que vio fue consecuencia de la pelea por el celular, y que ese idiota, Yamamoto, solo tenía ojos ¡para él!, para el hermoso chico de fiera y cristalina mirada esmeralda.
¿Dónde estaba Gokudera? ¿Dónde podía encontrarlo para secar sus lágrimas, para besarlo?
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Kami! Que Gokkun me perdone por hacerlo tan dramatico xD

1 comentario:

  1. sigo pensando k ha-chan se ve tan moe.....e.e en vdd soy mala x pensar asi? pero esk se ve moe u3ú le presto a fran si kiere (????) xDDDD

    se k seras buena y les daras un final feliz =3=<3

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