[SeIdea] Doux et Léger [14 Candy Hearts]

Colección: 14 Candy Hearts
Anime: Kimi to boku
Pareja: Yuta x Shun

Doux et léger

--¿Qué sucede? –Pregunta Shun con su típica expresión inocente y risueña.

--Nada. –Responde Yuta retomando el camino a casa.

Yuki y Kaname se ha adelantado, por razones que escapan a la comprensión del pelirosa, y que disgustan al mayor de los Asaba.

Por mas que ese par intente ocultarlo, la expresión de Yuki cuando hace preguntas sobre el porqué últimamente esta mas pegado al chico de gafas, porqué llega tarde a casa, porqué insisten en ir por un camino separado al de ellos, y otro saco de cientos de interrogantes mas, deja muy en claro lo que sucede en realidad. No, no es que hayan encontrado un pasatiempo en común, como Shun supone, al menos que besarse a escondidas en los callejones, pueda considerarse un pasatiempo. Tampoco es que estén jugando a las escondidillas, versión para dos. Es, simple y sencillamente, que están saliendo.

No le molesta a Yuta que su hermano salga con otro chico, o que ese chico sea Kaname. Lo que le molesta es que no lo acepten, y que por ende, tenga que ser él quien tenga que arreglar los malentendidos que surgen con Shun, quien aún piensa que si se toman de las manos y Kaname se pone rojo, es porque tal vez sea alérgico a que le agarren las manos, y Yuki lo que intenta, es acostumbrar a su organismo, en una especia de terapia extrema.

Como sea. Un punto bueno de que Yuki y Kaname se pierdan en cada esquina, es que puede estar a solas con Shun, tener para él esa sonrisa lenta que tanto adora, y que aun no sabe como hacerle saber, que ama.

¿Qué si lo ha intentado? De todas las maneras posibles. ¡Es más! Una semana atrás lo intentó por medio de mímica, aunque su rostro serio no sabe si fue una ventaja para hacerlo tan bien que Shun entendió: “quiero comer taiyaki”, o una desventaja, porque no acertó al “quiero salir contigo”.

Suspira. Algo raro en él. Shun se detiene y vuelve a plantarle cara, inflando las mejillas, con los puños en la cintura.

--¿Por qué no me quieres decir que te pasa?

--Porque no lo vas a entender. –Responde sin cambiar su expresión, o la falta de la misma.- Llevo un mes intentando hacer que lo entiendas.

--¿Un mes?

Yuta asiente.

--¿Tu declaración de amor?

Los ojos del gemelo se abren de par en par, sin creer lo que está escuchando, mientras Shun se da cuenta de que ha metido la pata hasta el fondo.

--¿Lo sabias? –Pregunta entornando la mirada.

Su pretendido se rasca la mejilla, desviando la mirada.

--Ah… pues veras. Si. –Responde titubeante.

--¿Desde cuando?

--Desde el inicio.

--¿Y se puede saber porque me has hecho hacer el ridículo hasta ahora? –Su voz se mantiene monocorde, no hay ni un ápice que delante emoción alguna, no de momento.

--Es que… -Puntea sus dedos, debatiéndose entre el pánico y la vergüenza.- t-te veías tan tierno c-cada que intentabas decla-rarte, q-que me costaba decirte que ya lo sabia.

Una venita le punza en la frente a Yuta (enojo), tomando de la muñeca a Shun, a quien un escalofrió le recorre la espalda.

--¿Y-Yuta…?

--Mis padres no van a llegar a casa sino hasta mañana, y Yuki va a dormir con Kaname hoy.

--¿E-eso que significa? –Ríe temeroso.

--Significa, que tenemos una noche para recuperar todo el mes en el que, como loco, estuve intentando decirte algo que ya sabias. –Remarca las últimas palabras, a modo de regaño, advertencia, y claro anuncio del castigo que le sobreviene, robándole un beso, resentido y al mismo tiempo dulce, que ceba cualquier queja que pueda tener el chico de ojos rosados, con el atardecer cayendo.